viernes, octubre 02, 2015

Challenger (2015), de Guillem López



Ya sabéis que no soy muy dado a seguir la literatura actual. En La Décima Víctima vivimos anclados en los siempre acogedores brazos de fantasmas del pasado y eludimos las luces modernas que con sus neones nos deslumbran demasiado, nosotros tan acostumbrados a vivir en la oscuridad. Pero no pudimos resistir la encendida recomendación de leer esta novela y, creedme, el viaje al presente ha merecido la pena. La novela Challenger (2015) de Guillem López está formada por 73 pequeñas historias que se van cruzando unas con otras y que acontecen al mismo tiempo que el desastre del Challenger, el transbordador espacial que explotó en los cielos a los 73 segundos de su despegue dejando un reguero de metal y fuego y las ilusiones del sueño del viaje espacial hechas añicos en apenas unos instantes. El evento estaba siendo retransmitido en directo por la televisión y millares de espectadores contemplaron estupefactos el terrible accidente. Guillem López parte de aquí para ofrecernos un mosaico de vidas a las que este hecho afecta o no, pero que se desarrollan en ese momento, como si se abriera una extraña puerta temporal que nos permitiera atisbar en esos 73 segundos 73 de esas existencias y su extraña ligazón, como si en realidad formáramos parte de un todo que se expandiera sin fin y que no pudiéramos controlar. Como el accidente, hechos impredecibles que nos superan y que nos marcan.

Este conjunto de pequeños relatos en apariencia cotidianos resultan apasionantes en algunas ocasiones e intrascendentes en otras, como no deja de ser así la vida al final. Un gran libro que te arrastra de una viñeta a la siguiente con los ojos, casi siempre, embebidos por la emoción y el asombro. Una visión oscura y negativa del ser humano y su acontecer: la mayoría de sus protagonistas sufren bien por su propia culpa, por decisiones erróneas, situaciones desesperantes o vicios inconfesables que tendrán de manera indefectible un mal desenlace, o bien por culpa de los demás, de cuya influencia perniciosa en ocasiones nos es imposible escapar. Sin embargo estas muestras de, diríamos, realismo sucio están atravesadas por el hálito de lo fantástico, por hechos extraños e inexplicables que abren multitud de ventanas que llevan a lo increíble, a otros mundos paralelos a este o a realidades que no podemos ver pero que están aquí con nosotros. Un mundo donde los hombres conviven con sus fantasmas, pero estos tienen vida espectral y los acompañan sin permitirles dejarlos atrás. O donde espeluznantes monstruos marinos cobran vida en el laboratorio sumergido en las profundidades de un científico loco cuyo fugado doppelgänger se pasea por las calles de una lejana ciudad. Portales a otras dimensiones que se abren sin que seamos capaces de atisbar hacia dónde nos llevarán e infinidad de sucesos paranormales que son descritos con la misma dolorosa frialdad que la realidad más común. Pero una frialdad jamás lejana a un sentir veraz en su emoción de la condición humana. Quizá en algún momento pensemos que López nos muestra solo la oscuridad del hombre, pero tal vez todo no sea sino que vivimos inmersos en esa oscuridad.

Nos la recomendaron y ahora os la recomendamos totalmente a su vez. Esta mezcla efervescente de realismo y fantasía desatada nos ha ganado. Felicitamos a la editorial Aristas Martínez no solo su insistencia en que no dejáramos de leerla, si no su valentía al atreverse a publicar esta obra que quizá no está recibiendo la respuesta que merece, pero que pensamos que poco a poco irá calando en los lectores. O así debería ser.


LÓPEZ, Guillem. Challenger. Badajoz: Aristas Martínez Ediciones, 2015. 505 p. Pulpas, narrativa; 15. ISBN 978-84-943794-1-3.  

2 comentarios:

Ramon dijo...

"hechos inpredecibles", al final del primer párrafo. Como todas tus recomendaciones, también esta es bienvenida. Un saludo!

Llosef dijo...

Madreeeee, ¡vaya falta gorda! ¡Muchas gracias por avisarme, Ramón!